Tres estilos de vida saludable en el puesto de trabajo

Foto del programa Elige vivir sano.

Foto del programa Elige vivir sano.

¿Cuándo fue la última vez que tomaste tu dosis diaria de agua en tu puesto de trabajo? Me hicieron esa pregunta ayer, a propósito de los hábitos que se adquieren en el desempeño de nuestras labores profesionales. Yo bebo agua frecuentemente, así que me pareció normal contestar que todos los días consumo alrededor de 2 litros de agua. Todas las personas a mi alrededor me observaron como si fuera una “cosa rara”.

Luego de esa situación, y de escuchar algunas historias, decidí averiguar un poco. Recientemente, se publicó un estudio sobre la relación que existe entre el estado de salud de las personas y los accidentes laborales. En síntesis, y con un resultado casi de Perogrullo, hay un 75% de mayor probabilidad que las personas sedentarias  sean más propensas a sufrir accidentes laborales, que las que declaran practicar alguna actividad física tres veces o más a la semana.

Lo que me llamó la atención del estudio que menciono es que es realizado en conjunto entre la Asociación Chilena de Seguridad y la Universidad Mayor. Esto, con el objetivo, según declaran en el estudio, que exista consciencia al interior de las organizaciones, de la importancia de promover hábitos saludables en los trabajadores.

Salud desde el puesto laboral

Como una de las premisas de Masvale Consultores, brindamos un taller encaminado a la salud laboral y al  bienestar. Basados en las estadísticas de las enfermedades más comunes en los empleados chilenos, éste taller orienta sus esfuerzos a tres hábitos que podemos desarrollar desde el puesto laboral: ejercicios físicos, alimentación saludable y manejo del estrés.

Ejercicios físicos: nuestros orientadores muestran algunos ejercicios de elongación dirigidos a evitar dolores lumbares y musculares; además de mejorar la circulación sanguínea.

Alimentación saludable: se entrega información sobre la manera en que se come en el puesto de trabajo. Este ítem se dirige a disminuir los snack con alto aporte de sodio y azúcar, y en su lugar ingerir onces más saludables. Además, respetar los horarios de comidas.

Manejo del estrés: ejercicios con énfasis en la meditación y respiración que permitan claridad mental  para tomar decisiones acertadas y oportunas. Asimismo, se intenta instalar un lenguaje positivo para desarrollar relaciones respetuosas entre los pares.

Te invito a que te informes más sobre este tema en: http://bit.ly/SURm7d.